¿CAMBIOS EN LA DIRECCIÓN DE ESCUELAS?


Los ribetes de Ribet
18 julio 2015

En una estrategia que busca hacer visible una “nueva” forma de intervención para escuelas con problemas más urgentes, el Subsecretario de Educación, Néstor Ribet, bajó de una oscura gestión previa a territorio.

Es un secreto a voces que sería el sucesor de De Lucía al frente de la Dirección General de Cultura y Educación (DGCyE). Un funcionario que accede a la gestión de la DGCyE de la mano de Mario Oporto como Director de Educación de Gestión Privada, con buenas relaciones con la Iglesia y especialmente con el Arzobispo de La Plata, monseñor Héctor Aguer, referente de la línea más conservadora de la Iglesia argentina. En los pasillos de la DGCyE se lo considera “un hombre de la Iglesia”.

El diario Página 12, en su tirada del 16 de julio de 2007, decía sobre Ribet que “es un hombre que desde el gobierno de Carlos Menem alterna sus gestiones entre el Estado y la educación privada en Nación o provincia.”

Los ribetes de Ribet son numerosos. Y en su supuesto asenso a patrón de la docencia de la provincia de Buenos Aires, se embarra pies y se acompaña por larguísimas y carísimas botas de sus terceras líneas, que pisan escuelas en ruinas, como hicieran el viernes en la ES N° 54. Y contrastando con una gestión lejanísima de De Lucía, este caballero pretende una llegada a las escuelas bajando recursos que no dejan de ser un vuelto para el Estado, y que representan algo así como el 0.00000000001% de lo que tendrían que hacer según su propia legislación (no según las necesidades reales).


Y en una cátedra de clientelismo, si ponerse colorado, saca conclusiones apresuradas, subjetiviza sus diagnósticos, y promete. Mucho promete: “¡Pero cómo puede ser!? No hay cargo. Maite, creale un cargo. Ahhh, dos, que sean 2 entonces.” ¿Sabrá este muchacho que faltan 5 MIL cargos en la Región 1?

Lo obsceno es que lo sabe, y que haciendo abuso de su poder no hace lo que corresponde sino aquello que pueda notarse. Maneja recursos que son de todxs de manera discrecional, tratando de comprar consenso y voluntades. A mal puerto.
Para tener ribetes de funcionario hay que mentir mucho, poner parches y evitar soluciones de fondo. Soslayar el tema de la construcción de edificio propio, problemática que afecta nada menos que a 9 de cada 10 escuelas secundarias del distrito.
Desde el Suteba Multicolor se han generado canales para transformar los reclamos parciales, locales en expresiones de la crisis edilicia. Y se ha empujado como en otras ocasiones para que las soluciones sean efectivas y pasibles de ser controladas por la comunidad educativa. También, se ha realizado “marca escalonada” a los funcionarios, y se ha tratado de comprometerlos en la mayor cantidad de aspectos que nos afectan en nuestras escuelas.


No resulta suficiente, pero no les haremos cómoda su gestión. Seguiremos siendo la mosca en la sopa, zumbando oídos sordos hasta que nos tengan que escuchar. 
Y en ese marco, volveremos del receso invernal con lucha, por los sueldos no pagados, por los cargos faltantes, por la infraestructura escolar, contra la precarización pedagógica y laboral, en defensa de nuestros derechos y la escuela pública, científica, no dogmática ni religiosa, no sexista. El 3 y 4 de agosto vamos a PARO Y MOVILIZACIÓN.