Sobre llovido...el salario que no alcanza



A propósito de la Inundación, la situación docente 
y el conflicto por mejores condiciones laborales y salariales



En estos días en la ciudad de La Plata estamos pasando una situación angustiante. Negocios cerrados, agua y barro por las calles, muy pocos autos circulando. Gente sacando sus cosas a la vereda que hasta ayer eran útiles, convertidas en toneladas de basura. Las comunicaciones colapsaron: no anduvieron los celulares ni internet ni teléfonos fijos. También los servicios de agua y electricidad. Hay zonas del partido de La Plata que continúan con muchos problemas. Centralmente, los barrios más pobres. La televisión no paró de hablar de saqueos. Cuando la nota saliente fue el enorme despliegue de solidaridad. Son momentos de mucha tristeza, pero al calor de miles de brazos hermanos, comprometidos, solidarios. Las donaciones vienen de todos los rincones del país, desde grandes concentraciones urbanas hasta pequeños pueblos. A todas, a todos ellos, gracias por estar, por preocuparse en estos momentos angustiantes.
En el marco de “la tragedia” que azotó a los platenses, la conducción de Suteba Provincia se comunicó con varias delegadas y delegados de escuelas de La Plata, con la intención de relevar situaciones de emergencia de los afiliados. Sin embargo, el sindicato no plantea ninguna propuesta, sólo piden información, en todo caso unos insuficientes 500  pesos para los damnificados afiliados a través de una tarjeta para la compra de alimentos, “la Baradel Card”. Recordemos que Suteba descuenta mes a mes el aporte de cerca de 80 mil afiliados. Hace decenas de años que acumula miles de pesos de superávit. En una situación desesperante como la actual, creemos que debe subsidiar ya a los docentes afiliados afectados por la catástrofe. Con un auxilio inmediato, material e integral. También debería tener un acto solidario con las compañeras/os docentes no afiliados.
Por otro lado, con mucha bronca observamos a la lista celeste recurriendo a las delegadas y delegados. Después de 4 años y una sola convocatoria al Cuerpo de Delegados, nos han encontrado una función, una utilidad. Nos llaman para que les contemos sobre los afiliados de nuestras escuelas afectados por la tragedia del agua. Claro que llaman los integrantes de Suteba Provincia, quizá porque si llamaran los de La Plata probablemente les iría peor ante la ausencia de tantos años. Necesitamos que se aceiten los canales democráticos de decisión y participación para lograr un acercamiento entre todos los compañeros y compañeras de las escuelas, reconocernos en el otro, tener una visión más amplia de la problemática que estamos viviendo, poder tomar decisiones de conjunto, organizarnos para afrontar el presente y lo que sigue, discutir las causas de la tragedia y alzar nuestra voz para que situaciones como esta no vuelvan a suceder. 4 años, 4 elecciones de delegados, 1 sola reunión… es el menosprecio por la función del delegado, el pisoteo a la democracia. Estamos amasando bronca porque estamos cansados de que decidan por nosotros y nos anoticien por televisión.
No solo esto, además, la Celeste "suspende" la lucha en el momento que más necesitamos profundizarla, para denunciar al gobierno como responsable por el abandono al que somete al pueblo en todos sus aspectos; obras públicas, salud, educación, vivienda. En el marco de los paros y de la lucha docente, se hubieran podido organizar caravanas solidarias, campaña de recolección de donacion. Convertir así a las escuelas en centros reales de organización de solidaridad y lucha. Contrariamente, la mayoría de la docencia, salvo del distrito de la plata que fue directa o indirectamente afectada por la catástrofe, será alejada de esta tarea militante y solidaria. La Celeste demuestra una vez más que no es su intención dar una pelea a fondo por nuestros derechos, y levanta las medidas a espaldas de los docentes, sin convocar a espacios de participación para que decidamos colectivamente como solidarizarnos con el pueblo afectado por las inundaciones y como continuar la lucha.
Por último, otro aspecto es la situación económica que atravesamos. La “tragedia” para nada natural se produce el día 2 de abril, el agua afloja al día siguiente. Ese día salimos de a miles a ayudar en una tarea infinita. Trabajamos continuamente durante durante días….durante horas. A la hora de comprar comida se manifiesta en nuestras billeteras un panorama que no desencaja con el contexto. Quebrados los docentes. Entonces vemos a Scioli hablar de solidaridad, a la presidenta, a Baradel y sentimos que quieren lavarse la cara con la tragedia. Que en un marco catastrófico se diluyen las responsabilidades sobre el salario de hambre al que nos someten. ¿Quieren ayudar? Aumentes los salarios de nuestros enfermeros y médicos, de los trabajadores del estado, de nuestros compañeros auxiliares, de las maestras, de las profes. Detengan el atraso salarial, paguen ya los salarios adeudados y los sueldos mal liquidados, pasen las sumas en negro al básico, aumenten el presupuesto para salud, para educación, infraestructura, comedores, becas, cargos. Esa es su responsabilidad.

Colectivo de Trabajadores/as de la Educación - SUTEBA La Plata
en el Encuentro Colectivo Docente Pcia de Bs As.