Crónicas de un fraude anunciado:



Fragmentos de un método, de una práctica asentada, perfeccionada, naturalizada por décadas.

1. Subí que te llevo.
Un lugar y un momento extraño. Y sin embargo se encuentran. A veces las cosas se dan así. Sebastián y la maestra. Ella tiene miedo, no desea exponerse. Pero Seba le cae bien, y lo que él expresa la conmueve. La maestra se suelta, de a poco, y relata cómo una “combi” salió con más de diez docentes del distrito de Brandsen hacia la ciudad de La Plata. Algunos de ellos habrían sido beneficiados con órdenes técnicos. Siempre tanta relación con la Dirección General de Escuelas, pensó Seba, y bromeó con algo de la “co-gestión”. Además se alarmó pensando que si cerca de diez docentes concurrieron desde Brandsen, tantos más lo habrán hecho de otros distritos cercanos.

2. Sala de profesores
La profe de teatro. Informalísima, claro. Pelo castaño oscuro. Corto ahora, hasta hace unos meses le daba a los hombros. El miércoles 21 de noviembre, como todos los miércoles, se encuentra en una escuela de la ciudad de La Plata. En sala de profesores (que a un tiempo es preceptoría, dirección, etc.) hablan de varias cosas. La profe comenta que había faltado, por colgada más bien, al convite que le hicieran. Iba a participar -dice convencida-, tenía intenciones. La invitó Maxi también, como a muchos de sus compañeros de Magdalena.
-- ¿ibas a ir a la asamblea?
-- Sí, pero me colgué… -- afirma la profe.
 -- ¿A la de acá o la de Magdalena?
-- No, no… a la de acá! -- enfatiza.
-- ¿Pero no me decías que sos afiliada por Magdalena?
-- Sii… -- responde la profe y en su entonación desliza interrogantes, dudas.
-- Pero no se puede… tenés que participar por el distrito por el que estás afiliada. Lo otro es trampa. -- le asegura su compañera de trabajo.

3 Martín pescador… me dejará pasar
La docente es joven, hace pocos años transita las escuelas. Pero como todo aquel que hace sus primeras armas, movido por las necesidades más que por los deseos, conoce las escuelas de lo más remotas e insólitas.
La falta de antigüedad impacta en el puntaje y obliga a los docentes jóvenes a comenzar en distritos vecinos, con menores cantidades de habitantes y de docentes, para conseguir horas o cargos. Así, la docente comenzó a trabajar en el distrito de Magdalena.
De allí trajo aprendizajes y conoció a muchas compañeras y compañeros. Conoció a la directora de la Escuela Primaria N°14, Mariel Paganini. También a varias de las maestras de la misma escuela, entre ellas las maestras Juliana Castaño y María de los Angeles Castaño. Las tres docentes, la directora y sus maestras llegaron con un contingente de unas 15 personas. Todos juntos esperaron en la puerta de la CTA de La Plata.
A partir de las 18 horas comenzaron a entrar a la Asamblea Anual Ordinaria de Suteba La Plata. A uno de los docentes del grupo de Magdalena se lo frenó tres veces en la entrada. Lo habían reconocido. Era el profesor Domínguez, oriundo de Magdalena, con trabajo en ese distrito y horas en la Escuela Técnica N°1 de Berisso.
Sobre el final de la jornada, ya afuera de la CTA, Domínguez apareció para sumarse a las/os compañeras/os que habían logrado filtrarse a la asamblea. Juntos se fueron rumbo a la “combi” que los llevaría de regreso a Magdalena, cómplices y jubilosos por la trampa que habían consumado. Igual que a su llegada, iban rodeando a Máximo Boga.

4. Matrimonio igualitario
El 30 de Marzo de 2012 el diario El Día titulaba “Primer casamiento entre personas del mismo sexo en Magdalena”. Esta noticia no sólo muestra el gran paso adelante en la igualdad de derechos de las personas. También subraya otras cosas.
El matrimonio se dio en Magdalena y entre dos dirigentes gremiales: Máximo Ricardo Boga y Fabio Hernán Lappano. La noticia relata que “Boga y Lappano tienen en común la actividad gremial que desempeñan, ya que ambos son dirigentes de SUTEBA de las seccionales Magdalena y Ensenada…”
El 16 de noviembre pasado se desarrolló el Congreso Anual Ordinario Provincial de Suteba. Allí, docentes congresales de la oposición del distrito de La Plata señalaron que habían sido víctimas (una vez más) de un engaño por parte de la conducción sindical. Denunciaron que el docente Máximo Boga, responsable del distrito de Magdalena, había concurrido y votado en la asamblea de un distrito al que no pertenece.
Roberto Baradel, titular de Suteba Provincia de Buenos Aires y parte de la misma lista que conduce en La Plata, afirmó “pero es sólo un voto”, haciendo referencia a que la votación había terminado con una diferencia de 40 votos. Sus dichos, sin embargo, además de confirmar la impunidad con que se mueven, corroboran elípticamente la trampa.

6. Que se vengan los chicos… de todas partes
Calor. Mucha gente amontonada. Un profe sentado más bien incómodo, pero como había varios parados se pensó afortunado. Mucha tensión. Se estaba desarrollando la Asamblea Anual Ordinaria de Suteba La Plata. Allí se definía entre otras cosas la Junta Electoral que tendría a cargo las elecciones seccionales del distrito en 2013.
La lista que conduce, la lista celeste, llegó al sindicato de La Plata dos veces. Y las dos con fraude: en 1988 consuma un fraude y al año siguiente expulsa a la comisión directiva que había ganado, la Lista Blanca; y en 2009 –las últimas elecciones- realiza otro fraude que tenemos más fresco en nuestra memoria. Por esta razón la tensión era palpable y las agrupaciones de oposición habían llevado una propuesta de Junta Electoral unificada, para frenar lo más posible el próximo fraude.
Sentada detrás del profe, una docente afirma: a esas dos personas las conozco (y dice sus nombres y apellidos), son de Florencio Varela. Más tarde, a Eduardo le comentaba una compañera cómo realizaban comunicaciones telefónicas pidiendo varios remises con destino a Varela.

Vamos a hacer lo que será
Fragmentos de un método. Piezas de una circunstancia que se consuma un jueves platense, pero que destella una práctica asentada, perfeccionada, naturalizada por décadas.
La lista celeste de Baradel tiene coherencia: cada vez que puede, hace trampa.
La imagen que tienen de sí mismos los adorna como “nacionales y populares”. Pero, en todo caso, es un pueblo y una nación que no habita nuestras escuelas. Pese a sus recursos, a sus licencias gremiales (que tanto criticaron en los otros), a su dinero, remises, combis, a sus dobles cargos rentados, a su acceso a la estructura gubernamental, etc., no logran hacer pie en las escuelas de La Plata. Por eso tienen que hacer trampa. Tienen que gastar dinero y horas organizando un fraude en lugar de poner esa energía en convencer a sus compañeros o enfrentar los ataques de De Lucía. Imagínense lo indigno de planificar durante más de un mes, cómo hacer para ganar una asamblea que sabían que iban a perder.
Porque saben que sus prácticas son inmorales e indignas, porque saben que mienten y que funcionan como un gremio al revés, que representa a sus patrones frente a sus trabajadores. Porque saben que es cierto, les molesta cuando una y otra vez les decimos la verdad: nacieron del fraude y van al fraude, una y otra vez.
Las agrupaciones de oposición tenemos muchos puntos de vista encontrados, pero sabemos que de conjunto expresamos a la mayoría de la docencia platense. Sabemos que tenemos la responsabilidad de terminar con la vergonzosa gestión actual. Y, compromiso, así lo haremos.